Poner el cuerpo

No sé por qué está bien visto "poner el cuerpo". Al menos eso creo yo, ¿no? Cuando alguien dice que "hay que ponerle el cuerpo" es algo bueno, ¿no? Como "hacerse cargo".
Ayer en terapia me di cuenta de algo re fuerte haciendo este juego de los almohadones. Cuando tuve que ponerme en el lugar de mi viejo, lo que me salió es poner el cuerpo y nada más.
Yo había puesto los almohadones como si fuera mi familia sentada a la mesa. El lugar de mi viejo está justo enfrente de la tele, o sea, es desde donde se ve mejor. Eso le sirve a mi viejo para desaparecer. Deja el cuerpo en la silla y su atención está en la tele. Se llena la boca de comida para no tener que hablar y se queda sentado y callado. Si le preguntás algo, mueve el bolo alimenticio a un costado de la boca y, medio con gestos y medio con ruidos guturales, te responde... algo. Entonces mi vieja o mi hermana lo putean por hablar con la boca llena, y podemos elegir: o lo esperamos a que termine de masticar y tragar, o seguimos con la charla y lo excluimos, que es en el fondo lo que quiere.
Ayer, cuando me puse en este lugar, me di cuenta de que eso es lo mismo que hago en el trabajo desde hace meses. Vengo todos los días, pongo el culo en la silla y estoy. No me pidas que haga nada, ya vine y con eso cumplí, igual que mi viejo.

Terapia

Tengo todos los patitos volados. Ayer tuve una sesión de terapia buenísima y terrible.
Tuve que armar a mi familia con almohadones e ir sentándome en cada uno para hablar desde el lugar de mi papá, mi mamá y mi hermana. Parece una boludez pero terminé agotado y las cosas que salieron son increíbles.
No es la primera vez que hacemos esto en terapia y me pasa que, cuando me pongo en el lugar de otro, puedo decir cosas que nunca me saldrían normalmente, ni siquiera en 6 años de psicoanálisis. Ayer, hablando desde mi hermana, dije un par de cosas que todavía no puedo creer.

Uno de los gatos locos


En la Facu

Hoy me traje la compu a la Facu para ver si puedo pasar las 3 horas y media de clase sin dormirme.
La semana pasada el plomo del profe justo me enganchó con los ojos cerrados y me dijo "No te duermas", pero con un tono que tenía menos de reproche que de pedido de ayuda. Me daba un poco de pena y eso es la muerte del miedo (tampoco se lleva muy bien con el respeto).
El tipo empezó como un arrogante insoportable y hace un mes nos contó que "estaba negociando la salida de su empresa". En otras palabras, lo rajaron.
No debe ser fácil de tragar para alguien en este ambiente súper competitivo, y menos para un creído de este nivel. Sin embargo, no puedo evitar sentir un poco de pena por él.
Probablemente me identifico un poco con él porque sé lo feo que es que te echen.

Cuando era más chico trabajé por poco tiempo en una empresa chiquita, de 20 empleados.
Entré por admiración a un profesor de la facultad, socio fundador de la empresa y de quien yo era ayudante. Tanto lo admiraba que fui ayudante dos años pese a que el horario era lunes y jueves, de 7 a 9 de la mañana.

Este trabajo/ayudantía fue una decepción muy fuerte.
Me di cuenta de que la materia era puro humo, marketing, palabras vacías pero muy fashion. A la vez vi que no aplicaban en la empresita nada de lo que enseñaban en la facultad.
El último trimestre el profesor se fue a Méjico para abrir una sucursal de la empresa y nos dejó a los 4 ayudantes "a cargo" de la materia. O sea, dimos todas las clases, desde la presentación del curso hasta la entrega de notas, preparamos los dos parciales, los corregimos, tomamos los finales y pusimos las notas. Y ninguno tenía más de 25 años.

Empecé a buscar otro trabajo, empapelé internet con mi CV y conseguí una oferta antes de irme de vacaciones. Bastante culpable me sentía cuando me fui, sabiendo que volvía de las vacaciones un miércoles y el lunes siguiente empezaba en el trabajo nuevo. Mi razonamiento fue: si les digo ahora, van a querer exprimirme hasta el último día y no van a dejar que me tome las vacaciones.

El día que volví descubrí que, en mi ausencia, me habían sacado mi computadora con una excusa medio ridícula. Mi jefe no apareció hasta las 6 y media de la tarde pero llamó para pedir que yo lo esperara.
Estuve todo el día al pedo pero con tiempo de ensayar mi renuncia. Incluso me escribí en un papelito todo lo que quería decir y fui al baño a ensayarlo un par de veces frente al espejo.
Finalmente mi jefe llegó, me llamó a su oficina para decirme que sabía que yo estaba buscando trabajo (¿se habrá dado cuenta cuando empecé a ir de traje?) y que lo mejor era no darme más responsabilidades en ese momento si yo tenía un pie fuera de la empresa.
O sea, me echó antes de que pudiera renunciar.

En ese momento me acuerdo de que llamé a mi novia súper contento: no sólo me había ahorrado el mal momento de la renuncia sino que me iban a pagar una indemnización ¡Y ya tenía una trabajo nuevo!
Ahora, que pasaron algunos años, me doy cuenta de que me habría hecho mucho mejor renunciar que dejarme echar. Me habría perdido dos mil pesos, es cierto, pero habría podido vomitarles toda la mierda que me tragué esos pocos meses pero que sigo cargando hasta hoy.

Exámenes

Tampoco voy a rendir el examen de hoy.
¿Y me querés decir quién cuernos me mandó anotarme en un posgrado laaaargo y aburrido, que perdió todo interés para mi hace meses? ¿Por qué no lo puedo largar a la mierda?
Haciendo la cuenta, creo que falté a más exámenes que los que rendí. Cursé 6 materias, aprobé 3, estoy cursando otras 2. Hasta ahora no abrí ninguna de esas hermosas carpetas que nos dan, llenas de fotocopias de libros que jamás leeré. ¿Cómo aprobé 3 materias entonces? Buena pregunta...
El mundo de las finanzas claramente no es para mi. ¿Y cuántos sombreros llevo ya probados y descartados? Auditoría , pymes, control de gestión, reporting & analysis (qué fashion que suena), experto en SAP, finanzas... Próximamente en su videoclub amigo: Recursos Humanos. En serio.
Mi CV parece un síntoma de esquizofrenia.

Hola

Bueno, bienvenidos a un nuevo blog. Es el tercero que abro en un año, todo gracias a mi obsesividad que me hace separar lo que escribo según... ¿qué? ¿el tipo de post que quiero escribir? ¿mi estado de ánimo cuando lo escribo? Andá a saber qué razones rebuscadas puede inventar mi tortuoso lado TOC.
Supongo que este será mi blog "de minita", donde escribo lo que se me da la gana sin mucho criterio.

El nombre se me ocurrió porque me gustan los blogs chiquitos, medio íntimos, que sólo son leídos por cuatro gatos locos. En un momento se me ocurrió que este podía ser un blog colectivo. Lo ideal sería tener otros tres escritores. Veremos si encuentro...